Después de la paliza del viaje llegó la tranquilidad. La primera semana fue todo instrucciones y conferencias. Presentaciones, trámites, etc. Nos inculcaron la responsabilidad que tenemos encima, y es cierto más vale no liarla y concentrarse en nuestra misión. Hemos venido aquí a primero aprender el idioma y la cultura, y despúes aprender los negocios.
Quiero recalcar una frase que me llenó de orgullo y emoción: Habeís venido aquí a representar a vuestro país, vuestra ciudad, vuestra família y escuela. No olvideís que lo primero que representaís es vuestro país, vuestra imagen lo refleja.
Lo bueno fue el montón de tiempo libre que tuve, a parte de los trámites para la creación de la cuenta bancaria japonesa, la tarjeta de dinero, el móvil, la tarjeta de residencia, la embajada, las tarjetas de transporte, etc.
Por eso aproveché las tardes libres para comprar cositas para mi mini casita, de la que haré un artículo especial cuando procese los vídeos que es un palo. La habitación o zulo venía pelada, así que a parte de comprar ropa que faltaba tuve que comprar de todo para la casa!
De la residencia he dicho que ya hablaré, namás decir que me costó lo suyo adaptarme a la nueva cama, mira que es de matrimonio (ojito) pero la almohada es tan pequeña! A parte el calor que hace aquí insoportable, humedo hasta el 90%, vamos que voy todo el día en pelotas (en casa).
Bueno, por las noches de sibarita. Cada noche con mis compañeros de la residencia ibamos a un nuevo garito a probar platos típicos y ponernos zorros de birra, sin pasarnos. Me ponía ciego de comida, está todo tan bueno. Por eso también voy a dedicar un artículo a los mejores manjares que he disfrutado. Absteneros de mirar las imagenes antes de comer.
He de decir que la mitad de las cosas que comí no tenía ni idea, ni tengo aún, de lo que son. En Japón sólo se habla japonés y todo está en japonés. Y si quieres comer como dios manda hay que ir a los sitios auténticos. Por eso, no teníamos ni zorra de lo que se ofrecía. Solución, casi siempre elejíamos al tun tun o simplemente nos copiábamos de lo que los demás comían. Y así es como voy haciendo, a no ser que el menú muestre imágenes.
Que no falte comentar la fiesta de celebración el viernes día de la presentación. Fue tan buena, que no voy a comentar nada ni publicar fotos. Con eso lo digo todo.
Las fotos o ya las he puesto o las pondré en artículos específicos.
Gambatte kudasai!
Quiero recalcar una frase que me llenó de orgullo y emoción: Habeís venido aquí a representar a vuestro país, vuestra ciudad, vuestra família y escuela. No olvideís que lo primero que representaís es vuestro país, vuestra imagen lo refleja.
Lo bueno fue el montón de tiempo libre que tuve, a parte de los trámites para la creación de la cuenta bancaria japonesa, la tarjeta de dinero, el móvil, la tarjeta de residencia, la embajada, las tarjetas de transporte, etc.
Por eso aproveché las tardes libres para comprar cositas para mi mini casita, de la que haré un artículo especial cuando procese los vídeos que es un palo. La habitación o zulo venía pelada, así que a parte de comprar ropa que faltaba tuve que comprar de todo para la casa!
De la residencia he dicho que ya hablaré, namás decir que me costó lo suyo adaptarme a la nueva cama, mira que es de matrimonio (ojito) pero la almohada es tan pequeña! A parte el calor que hace aquí insoportable, humedo hasta el 90%, vamos que voy todo el día en pelotas (en casa).
Bueno, por las noches de sibarita. Cada noche con mis compañeros de la residencia ibamos a un nuevo garito a probar platos típicos y ponernos zorros de birra, sin pasarnos. Me ponía ciego de comida, está todo tan bueno. Por eso también voy a dedicar un artículo a los mejores manjares que he disfrutado. Absteneros de mirar las imagenes antes de comer.
He de decir que la mitad de las cosas que comí no tenía ni idea, ni tengo aún, de lo que son. En Japón sólo se habla japonés y todo está en japonés. Y si quieres comer como dios manda hay que ir a los sitios auténticos. Por eso, no teníamos ni zorra de lo que se ofrecía. Solución, casi siempre elejíamos al tun tun o simplemente nos copiábamos de lo que los demás comían. Y así es como voy haciendo, a no ser que el menú muestre imágenes.
Que no falte comentar la fiesta de celebración el viernes día de la presentación. Fue tan buena, que no voy a comentar nada ni publicar fotos. Con eso lo digo todo.
Las fotos o ya las he puesto o las pondré en artículos específicos.
Sorry for not translating the article, but there's nothing interesting to remark. It's also boring anyway.
Gambatte kudasai!
0 comentarios